24 de junio.

Dicen que es mejor tarde que nunca, asique intenatre hacer aqui un resumen del viaje que hemos hecho allende los mares.

El viaje empezo al dia siguiente a la boda, el 24 de junio a las 9 de la mañana. Y es que a esa hora estabamos ya en el airport con aita, ama, Ana, los tios Esteban y Rosa y con el primo chino que tambien cogia un avion, pero rumbo a Hong Kong.

Cabia pensar que todo iba a ser coser y cantar pero no. Ya en el aerouerto tuvimos el primer sustillo del viaje, mi ESTA no era correcto! Nos habiamos confundido en un numero por lo que no nos dejaban volar. Bueno en realidad no me dejaban a mi... Menos mal que la chica de facturacion fue maja, se estiro y nos dirigio a la oficina de Iberia para corregir alli el error y volver a sacar el ESTA.

Una vez conseguido el permiso para entrar en los EEUU, facturar y a volar!

El primer vuelo Loiu-Madrid nos toco por separado. Imaginate mis nervios... Pues mucho no me duraron porque gracias al sueño, acabe roncando a coro con el señor de al lado.

Ya en Madrid la cosa fue diferente. Los nervios fueron in cresccendo y es que teniamos por delante un vuelo de 9:30h!!!!! menos mal que existen las pastillitas para dormir...

Llego la hora y subimos al avion, despego perfectamente y una vez ahi arriba el piloto muy amablemente nos informo de que sobre el aeropuerto de Miami (nuestro destino) habia una tormenta tropical y que no se sabia si podriamos aterrizar alli o no. Socorrrooooooooooooooo. Quiero bajarme del avion!!!! Tarde... Alli ibamos rumbo a la tormenta tropical Debby; menos mal que la pastilla hizo su trabajo y dormi bastante. Una maravilla de vuelo. A penas se movio y para cuando llegamos, Debby se habia desplazado al norte.

Despues de recoger las maletas (pensabamos que no iban a llegar porque estaban puestas en el billete de Andoni y es un pco gafe en esto...) fuimos a por nuestro coche: un Chrisler 200 creo que era. Muy bonito, andaba estupendamente y nos llevo a la perfeccion hasta West Palm Beach donde hicimos noche.

Como el sueño nos podia y habia que madrugar, rapiditos para la camar y a dormir... Por cierto el tamaño del cuarto era gigante.

Mientras nosotros dormimos Debby, la tormenta tropical, se convirtio en huracan. La cola estaba sobre nosotros.